Bueno y ahora la explicación del titulo.... cuatro intentos...CUATRO!!! y por fin la publicación de la receta. Mi primer intento fue con hojaldre...estaban muy buenos pero investigando vi que la masa en realidad era como una especie de bollo asi que me puse manos a la obra. El segundo intento salieron muy buenos pero el relleno era demasiado liquido y se salía por todas partes así que al final, les faltaba un poco de sabor. Busqué una receta con el relleno mas compacto. El tercer intento...puuuffff!!! no llegaron ni al horno...una masa imposible...dos horas amasando y al final...no pude trabajarla y por último, el cuatro: la masa del tercer intento con el relleno del cuarto y...el resultado....uuummm muy buenos la verdad...la espera merece la pena pero...solo recomendado para canela-adictos. En muchas recetas los presentan con un glaseado por encima.. en mi caso no, asi que tarea pendiente apuntada.
Espero que os gusten.
Ingredientes (salen unas 12 unidades)
Para la masa:
400 gr. de harina de fuerza
1 sobre y medio de levadura en polvo de panadería
30 gr. de azúcar
50 ml. de agua tibia
100 ml. de leche tibia
50 gr. de mantequilla
1 huevo
Una pizca de sal
½ cucharadita de extracto de vainilla
Para el relleno:
150 gr. de azúcar moreno
40 gr. de harina
5-6 cucharaditas de canela
120 gr. mantequilla a temperatura ambiente
Preparación
Para la masa: echamos todos los ingredientes en un bol y
movemos hasta que se haya compactando. Después nos ayudamos con las manos para
amasar bien hasta conseguir una bola firme (10 minutos mas o menos).
Engrasamos otro bol con un poquito de aceite de oliva.
Metemos la bola y tapamos con papel film. Dejamos en un lugar cálido para que
fermente la levadura (mas o menos 1,30 minutos).
Pasado ese tiempo la bola habrá aumentado de tamaño. Sobre
una superficie plana y enharinada estiramos la masa con la ayuda de un rodillo y preparamos el relleno.
Para el relleno: en un bol echamos todos los ingredientes
(mantequilla, azúcar moreno, canela y harina) y mezclamos hasta que se integre
todo. Tiene que quedar como una pasta.
Repartimos el relleno por la masa y enrollamos. Cortamos
porciones de unos 3 cm aprox. y los colocamos en una fuente apta para el horno.
Tapamos de nuevo con papel film y dejamos reposar de nuevo una hora u hora y
media.
Precalentamos el horno a 190º, opción arriba y abajo, y
metemos la fuente con los rollitos unos 20-25 minutos hasta
que estén dorados y al pincharlos con un palillo o cuchillo salga limpio.